En un giro inesperado, el líder independentista catalán Carles Puigdemont no podrá asistir a los debates electorales ni participar en la campaña electoral en Cataluña, a pesar de que el Congreso de los Diputados aprobó la amnistía para los líderes independentistas procesados. Esta decisión ha generado inquietud y decepción entre los partidarios de la independencia catalana, que esperaban que Puigdemont pudiera regresar a Cataluña y participar en la campaña electoral. Sin embargo, la justicia española ha dictaminado que Puigdemont no puede entrar en España mientras tenga una orden de detención internacional en su contra.
Puigdemont, atrapado en el limbo: no puede asistir a debates ni campaña electoral en Cataluña
El candidato de Junts, Carles Puigdemont, se encuentra en una situación complicada. A pesar de no haber participado en ningún acto de campaña en Cataluña ni haber participado de los debates electorales, su ausencia no parece haber afectado la intención de voto de su coalición, Junts+, que parte segunda y con posibilidades de formar gobierno según las encuestas.
La ley de amnistía, una de las condiciones de Junts para investir a Sánchez y apoyar su Gobierno durante la legislatura, fue aprobada por mayoría absoluta en el Congreso el pasado 14 de marzo. Sin embargo, esto no ha permitido al expresidente catalán volver a España para tener un papel activo en la campaña.
¿Por qué no puede Puigdemont volver a Cataluña para la campaña electoral?
La respuesta es simple: la amnistía aún debe pasar por el Senado y ratificarse. Aunque la ley de amnistía quedó aprobada por mayoría absoluta del Congreso de los Diputados, el proceso legislativo establece que la norma debe ser ratificada por el Senado, siguiendo el recorrido habitual de las leyes.
El Senado, en manos del PP, ha pospuesto los plazos lo máximo posible: la fecha límite para su tramitación en el Senado es de dos meses, plazo que se cumplirá el día 14 de mayo, la semana que viene. Salvo sorpresa, el PP rechazará la norma y el Senado la remitirá de vuelta al Congreso, donde será aprobada definitivamente en las próximas semanas, el día 30 de mayo.
Por lo tanto, hasta que la norma no esté aprobada definitivamente e incluida en el BOE, no tiene ningún efecto, por lo que los beneficiados por la medida de gracia, entre ellos el propio Puigdemont, todavía acumulan causas con la justicia.
Consecuencias de la ausencia de Puigdemont
Si Puigdemont decidiese volver a España, sería detenido y puesto en disposición judicial de acuerdo a los cargos que aún pesan sobre él. Para volver sin ser detenido, el expresidente catalán deberá esperar a la aprobación definitiva de la amnistía, su entrada en vigor y la aplicación de la misma por parte de los jueces.
Además, también está el tema de la cuestión prejudicial: si un juez eleva consulta a la Unión Europea, se podrían suspender cautelarmente los efectos de la amnistía hasta que el TJUE se pronuncie, algo que mantiene el Tribunal Supremo.
El propio Puigdemont ha anunciado su intención de volver a Cataluña para su hipotética sesión de investidura si los números le dan. De hecho, el candidato de Junts ha asegurado que contempla ser detenido cuando regrese para asistir al debate, aunque ha asegurado que es una opción a la que le ve muy poco recorrido por la entrada en vigor de amnistía.
La espera es agotadora: Puigdemont no puede regresar a Cataluña hasta que no esté aprobada la amnistía
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