En el año 2024, las personas que padecen de ciertas enfermedades crónicas o discapacidades podrán acceder a una prestación económica gracias a los títulos de pensión por invalidez. Estas ayudas se conceden a aquellos que, debido a su condición de salud, no pueden desempeñar su trabajo o realizar actividades cotidianas de manera autónoma. A continuación, exploraremos las enfermedades que otorgan acceso a una prestación en 2024, así como los requisitos y procedimientos para solicitar esta ayuda. Si tú o un ser querido sufre de alguna de estas afecciones, es fundamental que conozcas tus derechos y opciones para obtener la ayuda que necesitas.
Patologías que dan derecho a una pensión por invalidez: Descubre las enfermedades que te otorgan acceso a una prestación económica
El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) contempla una prestación económica por incapacidad permanente. Los trabajadores que atraviesen problemas de salud que les impiden ejercer su labor diaria tienen derecho a una serie de ayudas económicas o pensiones del INSS.
Con esta medida, pueden seguir cobrando un importe concreto al mes a pesar de su enfermedad o accidente. Aunque el INSS no detalla en una lista que patologías dan este derecho a los empleados, hay una serie de enfermedades que el tribunal médico suele contemplar como merecedoras de la ayuda económica.
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No existe una lista oficial de enfermedades o accidentes que den derecho a una pensión. Sin embargo, hay patologías que suelen otorgar esta prestación económica.
Enfermedades que suelen dar derecho a una pensión
Entre las patologías que se consideran merecedoras de la ayuda económica se encuentran:
Cardiología:
- Cardiopatías
- Miocardiopatías
- Arterioesclerosis
- Enfermedades cardiovasculares
- Aneurisma
- Infarto agudo de miocardio
- Insuficiencia mitral
- Síndrome Wolf-Parkinson-White
Oncología:
- Cáncer de mama
- Cáncer de pulmón
- Cáncer de recto
Reumatología:
- Síndrome de fatiga crónica
- Fibromialgia
- Artritis reumatoide
- Espondilitis anquilosante
Otorrinolaringología:
- Hipacusia (sordera parcial)
- Síndrome de Méniere (trastorno del oído interno)
Enfermedades del pulmón:
- EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica)
- Apnea del sueño
- Astma profesional
- Enfisema
- Enfermedades respiratorias causadas por el amianto
Digestivo:
- Enfermedad de Crohn
- Obesidad mórbida
- Colitis ulcerosa
- Pancreatitis crónica
Neurología:
- Alzheimer
- Migraña
- Parkinson
- Esclerosis múltiple
- Demencia
- Traumatismos craneoencefálicos
- Neuropatía periférica
- Miastenia Gravis (enfermedad autoinmune caracterizada por la debilidad muscular variable)
Es importante destacar que cada caso es único y que el papel del tribunal de evaluación es fundamental para determinar si una enfermedad da derecho a una pensión.
Tipos de incapacidad
El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) distingue diferentes grados de incapacidad:
Incapacidad parcial para la profesión habitual:
Supone una disminución no inferior al 33% para desempeñar esa labor.
Incapacidad total para la profesión habitual:
Aunque no se puede llevar a cabo ese trabajo, sí es posible dedicarse a otra cosa distinta.
Gran invalidez:
En este caso, el trabajador está incapacitado permanentemente para trabajar y además necesita la asistencia de otra persona para los actos más esenciales de la vida.
Si sufras una de estas enfermedades u otras, puedes ponerte en contacto con un abogado para determinar las opciones que tienes para solicitar una incapacidad permanente. Obtener una valoración positiva dará pie a obtener la pensión o ayuda económica con la que completar tus ingresos.
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