En el año 2023, España ha incrementado significativamente el número de radares en sus carreteras, convirtiéndose en uno de los países de Europa con mayor densidad de estos dispositivos de control de velocidad. Esta medida tiene como objetivo principal mejorar la seguridad vial y reducir los accidentes en las carreteras españolas. Con esta acción, se busca concienciar a los conductores sobre la importancia de respetar los límites de velocidad y cumplir con las normas de tráfico establecidas. La implementación de más radares en las vías españolas refleja el compromiso de las autoridades en garantizar la protección de los usuarios de las carreteras y fomentar una conducción responsable. España se posiciona así como un referente en materia de seguridad vial en el contexto europeo.
España incrementa su número de radares en carreteras, liderando en Europa
En un informe presentado por Coyote, se revela que España ha experimentado un crecimiento del 4% en la cantidad de radares en sus carreteras desde enero de 2023. Con un total que roza los 3.000 dispositivos, España se sitúa a la vanguardia en cuanto a presencia de radares en Europa. Esta tendencia al alza se ha mantenido por segundo año consecutivo, con un aumento del 7% en 2022.
Coyote presenta informe: España roza los 3.000 radares en carreteras
El Observatorio de radares en España, elaborado por Coyote por tercer año consecutivo, ofrece un panorama detallado de la situación de los radares en el país. Se destaca la presencia de 2.941 radares a lo largo de la red vial española, incluyendo radares fijos, de semáforo, de tramo y de cinturón y móvil. Cataluña, Andalucía y Castilla y León se posicionan como las comunidades con mayor número de estos dispositivos, acumulando la mitad de los radares de toda España.
El informe también enfatiza la importancia de los sistemas de control de velocidad para garantizar la seguridad en las carreteras, aunque señala que algunos radares se ubican en tramos con fines recaudatorios más que preventivos. Asimismo, se destaca que las carreteras convencionales son las que registran más siniestros, siendo esenciales los radares para controlar la velocidad en estos tramos.
En un análisis comparativo con otros países europeos, se confirma que España cuenta con una de las mayores densidades de radares en el continente, con una presencia significativa en autopistas, autovías, carreteras secundarias y ciudades. Esta densidad se traduce en una mayor concienciación sobre la seguridad vial y en la reducción de accidentes de tráfico en las vías españolas.
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