En una noche que será recordada por generaciones, Alemania y España se dieron cita en un partido que pasará a la historia como uno de los más emocionantes y decisivos de la Copa Mundial de Fútbol. Fue el 6 de julio de 2008, cuando la selección española, liderada por figuras como Iniesta, Xavi y Casillas, se enfrentó a la poderosa selección alemana en la semifinal del torneo. El partido, disputado en el Stadion Ernst Happel de Viena, Austria, fue un auténtico duelo de titanes, donde la valentía y la determinación de los españoles se impusieron sobre la potencia germánica, consagrando a la mejor generación de la selección española como una de las mejores de todos los tiempos.
La Noche que Forjó la Leyenda de la Selección Española
El 29 de junio de 2008 es una fecha que quedará grabada en la memoria de todos los aficionados del fútbol español. Esa noche, la selección española, liderada por Luis Aragonés, se enfrentó a Alemania en la final de la Eurocopa 2008 en Viena.
Fernando Torres anotó el único tanto de la final ante Alemania, un gol que consagró a la mejor generación de la Roja.
Antes de verse las caras con Alemania, la selección española ya había derrotado a todos aquellos que se pusieron en su camino. Rusia, Suecia, Grecia, Italia, y nuevamente Rusia, no pudieron hacer nada para evitar que los muchachos del Sabio de Hortaleza llegaran a su primera final después de 24 años.
La expectación en España era máxima. Las calles se inundaron de banderas y camisetas con los colores de la Roja. Había esperanzas de ganar a una Alemania todopoderosa. Los seguidores y los futbolistas creían. Luis Aragonés lo tenía más claro aún.
Niño, salga ahí y demuestra que es el mejor. Va a hacer dos goles y vamos a ser campeones, le dijo a Fernando Torres en los minutos previos al pitido inicial del Alemania - España. Se equivocó, pero solo en el número de tantos. El objetivo final lo clavó.
Los españoles, sin la presencia de David Villa por lesión, entraron enchufados al terreno de juego. Antes de los 10 minutos, Andrés Iniesta ya puso en aprietos a Jens Lehmann. Fue solo un aviso. La primera ocasión de muchas que disfrutó la selección de Luis Aragonés.
En el minuto 33, el peligro del Niño desató la locura en las gradas del Ernst Happel. Xavi Hernández le filtró un pase a la espalda de la defensa alemana. Fernando Torres superó a Philipp Lahm y picó el balón por encima de Lehmann. 0-1 en el marcador y el inicio de un claro dominio germano para buscar el empate.
La posesión alemana no se tradujo en mayores oportunidades de cara a portería. Al revés. España siguió probando suerte. Xavi y David Silva fueron a por el segundo desde lejos. Alemania intentó revivir por medio de Ballack, pero no fue suficiente.
La selección española llegó al final del encuentro sin perder de vista la portería de Lehmann. Defendió con todo cuando tocaba. Persiguió el 0-2 cuando pudo. Y entre unas y otras, Iker Casillas ya estaba levantando la Eurocopa al cielo de Viena.
Más de 16 años después de aquella noche mágica, y con otra Eurocopa conquistada por el camino, España se enfrenta a Alemania, la anfitriona, por primera vez en este torneo desde entonces. En las cabezas de Luis de la Fuente y sus hombres solo una cosa: el pase a las semifinales.
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