La Policía ha revelado que cuatro presuntos yihadistas han sido arrestados en España por presuntamente financiar a combatientes del Estado Islámico en Siria. Según las autoridades, estos individuos habrían enviado recursos económicos para apoyar las actividades terroristas en la región. Este nuevo hallazgo pone de manifiesto la preocupante relación entre el terrorismo internacional y el territorio español, evidenciando la necesidad de una estricta vigilancia y cooperación internacional para combatir este tipo de actividades ilícitas. Las investigaciones continúan en marcha para esclarecer el alcance de esta red de financiación y prevenir futuros actos terroristas.
Policías declaran en juicio que yihadistas arrestados financiaron a combatientes en Siria
En la Audiencia Nacional, policías nacionales encargados de la investigación han declarado en el juicio a tres sirios y un marroquí detenidos en 2019 y 2020 en España por delitos de terrorismo. Según los testimonios, los acusados enviaron dinero a campos de refugiados de Siria con el fin de financiar el retorno a sus países de procedencia de combatientes de Dáesh. Dos de los acusados fueron arrestados en Madrid y los otros en la localidad madrileña de Fuenlabrada y en la toledana de Yuncos. El fiscal solicita diez años de prisión por el delito de financiación del terrorismo y tres años adicionales por falsedad de documentos para dos de ellos.
Juicio a acusados por financiar a Dáesh desde España para retorno de combatientes
La Audiencia Nacional ha reanudado el juicio a cuatro acusados, quienes son señalados de estar relacionados con una red que enviaba dinero a personas vinculadas con Dáesh en campos de refugiados de Siria, utilizando un método conocido como hawala. Este sistema de transferencia de dinero se caracteriza por su opacidad y por moverse a través de una cadena de colaboradores, principalmente con entregas mano a mano. Los detenidos niegan su implicación en los envíos de dinero.
De acuerdo con el fiscal, ante la pérdida de poder territorial de Dáesh en Siria, el objetivo de la red era facilitar el retorno de los combatientes a sus países de origen para que continuaran con actividades terroristas. Durante el juicio, policías encargados de la investigación han testificado, revelando que un agente encubierto logró contactar con combatientes de Dáesh en Siria y con personas en el campo de refugiados de Al Hol.
El agente encubierto descubrió que los acusados gestionaban desde España el envío de dinero a estas personas en Siria para sus propósitos y para salir de aquella zona. Además, se ha revelado que aparte de los remesadores en España, también se nutrían de fondos provenientes de países europeos como Francia, Bélgica y Alemania. En las conversaciones con los combatientes en Siria y mujeres en el campo de refugiados, se facilitaron datos de los remesadores en España, incluyendo a los acusados.
En el testimonio de la esposa de uno de los acusados sirios, se ha mencionado que llegaron a España hace seis años desde Líbano, huyendo de la guerra en Siria. Según ella, su marido, abogado y miembro del Partido Árabe Socialista en Siria, fue llevado dos veces por grupos terroristas antes de llegar a España como refugiado.
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