En una noticia que ha traído alivio y esperanza, Sevilla ha logrado superar la sequía que la aquejaba durante meses, lo que ha permitido levantar las restricciones al consumo de agua potable impuestas previamente. Este hito se ha alcanzado gracias a las últimas lluvias que han caído sobre la región, recargando los embalses y garantizando un suministro adecuado para la población. Esta decisión representa un respiro para los habitantes de Sevilla, quienes han enfrentado la escasez de agua con medidas de ahorro y concienciación. Ahora, con la normalización de la situación, se espera que la ciudad pueda recuperar su ritmo cotidiano y disfrutar de un suministro adecuado y seguro de agua potable.
Sevilla levanta restricciones al consumo de agua tras superar la sequía histórica, Emasesa anuncia fin de la sequía en Sevilla y rebaja nivel de alerta
El Embalse El Gergal en Sevilla, gestionado por la empresa Emasesa, ha sido testigo de un hito trascendental en la región. Tras más de cinco años de ardua sequía, Sevilla finalmente ha logrado dejar atrás este desafío natural y ha entrado oficialmente en el estado de normalidad. Esto ha llevado a la desactivación de las limitaciones al consumo de agua potable que estaban vigentes, marcando así un hito en la gestión hídrica de la ciudad.
El delegado de Urbanismo y consejero de Emasesa, Juan De la Rosa, ha comunicado esta buena noticia a la población, destacando que las recientes lluvias caídas en la región, especialmente en la primera semana de marzo, han elevado el nivel de los pantanos que abastecen a Sevilla y su área metropolitana hasta alcanzar el 67% de su capacidad, con un total de 434 hm³ de agua embalsada. Este incremento ha permitido situar el volumen disponible por encima del umbral de prealerta, establecido en 324 hm³, asegurando así el suministro de agua en condiciones normales durante los próximos meses.
Emasesa ha rebajado el estado de emergencia al de alerta, lo que implica que los sevillanos ya no tendrán restricciones en el uso del agua potable para actividades como regar jardines, llenar piscinas o fuentes, o lavar vehículos con manguera. Estas medidas restrictivas, tanto para el ámbito doméstico como público, han sido pospuestas gracias a la mejora en las reservas hídricas de la región.
El delegado De la Rosa ha resaltado la importancia de la colaboración ciudadana en el uso responsable del agua y ha subrayado que, si bien se han levantado las restricciones, es fundamental seguir considerando el agua como un recurso escaso y utilizarlo de manera responsable. Durante la sequía, los niveles de consumo han descendido significativamente, alcanzando los 105 litros por persona y día, el registro más bajo en la historia de la empresa pública de aguas.
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