En un giro sorprendente, Suiza y otros cinco países han amenazado con retirar su participación en el Festival de la Canción de Eurovisión apenas 25 minutos antes de la gran final. Esta dramática decisión ha generado un clima de incertidumbre en el escenario del concurso, donde cientos de millones de espectadores esperaban disfrutar de la emisión en vivo de la gran final. La razón detrás de esta amenaza no ha sido revelada, pero se especula que puede estar relacionada con problemas técnicos o cuestiones de contenido. Sea cual sea el motivo, esta noticia ha generado un gran revuelo en el mundo del entretenimiento y ha dejado a los fanáticos de Eurovisión con la boca abierta.
Polémica en Eurovisión: países, incluyendo Suiza, amenazan con abandonar el concurso
La edición 2024 de Eurovisión ha estado marcada por la polémica y la incertidumbre. La participación de Israel y la expulsión de Países Bajos a última hora, fueron decisiones que no terminaron de gustar a todos. Como resultado, hasta seis países, incluyendo Suiza, ganador oficial, amenazaron con abandonar el concurso.
Además de Suiza, Noruega, Grecia, Reino Unido, Portugal e Irlanda también cuestionaron la organización del concurso. Sus delegaciones llegaron a convocar una reunión de urgencia con la Unión Europea de Radiodifusión (UER) cuando solo quedaban 25 minutos para que comenzara el show.
Muchos de nosotros reaccionamos ante la oportunidad de Israel de utilizar Eurovisión como su propio instrumento político, dice Magnus Børmark, integrante de la candidatura noruega. Pensamos en retirarnos hasta el último segundo.
El principal motivo de la disputa era la participación de Israel, a pesar de la ofensiva israelí sobre Gaza que había causado ya más de 34.000 muertos, la mayoría civiles. Nuestro punto en común era que no queríamos concursar para ser usados y marcados en una máquina de propaganda de guerra en Israel, añade Børmark. Participamos para crear un espacio donde podamos unirnos en la música, y no en una situación política en la que todos eligen bando y se odian unos a otros.
Además, a estos países tampoco les gustó que se descalificara a Países Bajos a pocas horas de la gran final. Joost Klein fue eliminado del concurso por haber tenido un comportamiento supuestamente inapropiado con una trabajadora del la organización.
Ante esta situación, la respuesta de los países anteriormente mencionados fue inminente. Irlanda decidió no participar en el ensayo del sábado y Suiza y Grecia decidieron saltarse el tradicional desfile de banderas.
Finalmente y a tan solo media hora del inicio de la gala final, los países pudieron llegar a un acuerdo con la UER y la televisión sueca, organizadores oficial del festival. Sin este acuerdo, la tensión habría reinado sobre el escenario y Suiza, quizás no se habría hecho con el micrófono de cristal.
Uno de los ejecutivos de Eurovisión declaró: El festival no es el escenario en el que resolver los problemas del mundo.
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