Título de un filme argentino que desafía estereotipos y abre nuevas perspectivas sobre la discapacidad
El séptimo arte ha sido siempre un reflejo de la sociedad, y en este sentido, el filme argentino que nos ocupa es un ejemplo paradigmático de cómo el cine puede ser un agente de cambio y reflexión. Con su nueva perspectiva sobre la discapacidad, este filme rompe con los estereotipos y los prejuicios que durante tanto tiempo han rodeado a este tema. La representación auténtica de la experiencia de las personas con discapacidad es un paso fundamental hacia la inclusión y la igualdad de oportunidades. A continuación, profundizaremos en esta nueva forma de contar historias que está revolucionando la industria cinematográfica.
Simón de la montaña: un filme argentino que rompe estereotipos sobre la discapacidad
'Simón de la montaña', la película argentina dirigida por Federico Luis, intenta una nueva mirada sobre la discapacidad. Su joven protagonista, interpretado por Lorenzo Ferro, decide pasar el tiempo con dos chicos diferentes y descubre así una condición que le permite crear sus propias reglas, en un mundo que no parece estar diseñado para las personas diferentes.
Un viaje hacia la otredad
El filme es un intento de viajar hacia la otredad y cuestionar las ideas más comunes y corrientes sobre lo que los humanos pueden hacer o no, según explica el director Federico Luis. La película, coproducida con Chile y Uruguay, cuenta la historia de Simón, un chico que se integra en un grupo de personas con discapacidad cognitiva, fingiendo ser uno de ellos y a espaldas de sus padres.
Lorenzo Ferro, quien saltó a la fama con 'El ángel' (Luis Ortega, 2018), estrenada también en Cannes, inicialmente le dijo que no al director, amigo suyo desde hace tiempo, cuando le propuso el reto. Sin embargo, Federico Luis le fue convenciendo y Ferro aceptó el papel con la condición de ensayar mucho antes de lanzarse al vacío de este singular personaje.
Un personaje construido sobre preguntas y dudas
El personaje de Simón se fija sobre todo en el más carismático de la pandilla de personajes que componen el corazón de la película, llamado Pehuén Pedre. Para Ferro, es la propia película la que va creando a su Simón como si fuera una construcción fantástica alrededor de una serie de preguntas, inquietudes, disconformidades y conformidades sobre lo que es posible que uno sea y lo que no, y lo que uno debería hacer según las demás personas.
Una buena noticia en un velorio
El desembarco de esta película en Cannes y de otros títulos argentinos es una gran noticia para el séptimo arte del país latinoamericano, muy apreciado en Cannes. Sin embargo, este año llega en uno de los peores contextos de crisis de su historia debido a los recortes del Gobierno del ultraliberal Javier Milei.
Federico Luis considera que es como una buena noticia en un velorio. No deja de ser supertriste. El director apunta que el cine que dejará de hacerse en su país será precisamente el de creadores independientes como él, motivo por el cual no sabe si podrá continuar con su carrera en Argentina.
'Simón de la montaña' es, según apunta el realizador porteño, una de las últimas películas producidas con el auspicio del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) argentino antes de quedar suspendida su actividad con un recorte drástico de la financiación estatal.
El viaje hasta Francia para defender la película en persona, por culpa de la dura situación económica en Argentina, también sido complicado para el equipo, pero les te enorgullece venir a Cannes y que incluso en los momentos más difíciles uno pueda pararse y decir 'todavía estamos acá, vivos, subraya Ferro.
Deja una respuesta