En un movimiento de solidaridad sin precedentes, estudiantes universitarios de todo el mundo se han unido para denunciar la situación de conflicto en Gaza. En las acampadas universitarias por Palestina, los jóvenes han decidido tomar una postura firme contra la ocupación israelí y mostrar su apoyo a la población palestina. El lema de esta iniciativa, Nuestro sufrimiento es leve comparado con el de Gaza, resume el espíritu de este movimiento que busca concienciar a la opinión pública sobre la grave situación humanitaria que se vive en la Franja de Gaza. A través de este esfuerzo colectivo, los estudiantes buscan llamar la atención sobre la injusticia y reclamar un futuro más justo para el pueblo palestino.
- La solidaridad universitaria: Estudiantes españoles se unen por Palestina en acampadas y manifestaciones
- El origen de las acampadas
- La Universidad de Valencia, pionera en la lucha
- La extensión de las acampadas por España
- Las protestas universitarias propalestinas se extienden en Europa
- La vida en las acampadas
- La cadena de acampadas universitarias propalestinas se extienden en España
- La solidaridad internacional
La solidaridad universitaria: Estudiantes españoles se unen por Palestina en acampadas y manifestaciones
Cientos de estudiantes de cinco universidades españolas se encuentran acampados en sus campus en protesta por el conflicto palestino-israelí en la Franja de Gaza. En Valencia, las tiendas llevan puestas once días, mientras que, en Madrid, Barcelona, varias ciudades del País Vasco y Sevilla se han comenzado a montar a lo largo de esta semana.
Las concentraciones han sido convocadas para exigir la ruptura de acuerdos entre las universidades españolas, tanto públicas como privadas, y cualquier organismo o empresa que colabore de alguna manera con Israel.
El origen de las acampadas
Estos asentamientos tienen como origen la Universidad de Columbia de Nueva York, en la que, el 18 de abril, cientos de estudiantes comenzaron a cubrir el campus de tiendas de campaña. En cuestión de horas, jóvenes de todo el país reprodujeron estas acampadas en sus facultades y, tras replicarse en algunas ciudades europeas, llegaron a España.
La Universidad de Valencia, pionera en la lucha
Los pioneros fueron los estudiantes de la Universitat de Valencia (UV), que llevan desde el 29 de abril durmiendo en la facultad de Filosofía con la intención de presionar para que la institución corte sus relaciones académicas y de investigación con varios órganos a los que culpan de ser cómplices del apartheid.
La extensión de las acampadas por España
Influidos por los valencianos, los universitarios catalanes plantaron sus tiendas el lunes en el claustro de la Universitat de Barcelona (UB) tras una manifestación por el Raval. Mientras que los madrileños se asentaron este martes a las 12.30 horas a las puertas de la facultad de Medicina de la Universidad Complutense (UCM).
Las protestas universitarias propalestinas se extienden en Europa
Los estudiantes aseguran que las noches son frías, pero que todo sacrificio es mínimo comparado con el actual sufrimiento en Gaza. Así están viviendo las acampadas sus protagonistas: los universitarios.
La vida en las acampadas
Sonia, Almudena y Daniel, estudiantes de la Universidad Complutense de Madrid, reciben a 20minutos en la facultad de Medicina, ahora cubierta por decenas de tiendas adornadas con banderas palestinas y distribuidas por el césped.
Los tres coinciden en que decidieron organizarse para seguir con la ola de solidaridad internacional por Palestina y que, en cuanto se empezó a correr la voz de la acampada, acudieron a la Complutense de forma casi automática.
Daniel y Sonia, de 19 y 20 años, han pasado la primera noche en el campus con mucho frío, pero también con alegría por la solidaridad y buen ambiente con los compañeros con los que jugaron a las cartas, tocaron la guitarra e intercambiaron inquietudes.
La cadena de acampadas universitarias propalestinas se extienden en España
La Universidad de Barcelona, la Universitat de Barcelona (UB), también se ha unido a la lucha. Jazz, Aleix, Waldo y Hanny llevan dos noches durmiendo en el característico claustro de la UB.
Aleix, de 23 años, es estudiante de la Universitat Autónoma de Barcelona y asegura que seguirá acampado hasta que la UB comunique que rompe relaciones académicas, de investigación y de intercambio con instituciones colaboradoras con Israel.
La solidaridad internacional
Además de los refugiados, la concentración catalana es la que más participación europea está reuniendo. Waldo y Hanny son de Países Bajos, estudian Relaciones Internacionales y su principal incentivo para pernoctar en la UB es no normalizar el genocidio como algo por lo que no se puede hacer nada.
La Universidad de Valencia, donde empezó todo, también sigue en la lucha. Laith Abdel-Qader, palestino cisjordano que lleva participando en la protesta desde el 29 de abril, asegura que esta acampada significa mucho más de lo que se puede explicar.
Laith, Marc y Andra son algunos de los participantes que siguen en la UV desde el primer día. Marc Caballer, de 26 años y graduado por la UV en estudios hispanos, asegura que la moral está muy alta por el contagio a otras universidades.
Por otro lado, Andra, de 22 años y estudiante de lenguas modernas, hace tres días que decidió unirse a dormir en el campus y está intentando ayudar e implicarse de todas las formas posibles participando en todas las actividades y talleres sobre el mundo árabe que profesores y voluntarios están organizando.
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