En un momento crítico para la Unión Europea, el Consejo Europeo ha decidido apostar por la experiencia y la sabiduría del ex primer ministro portugués, António Costa, para liderar la institución en calidad de nuevo presidente. Conocido por su habilidad para cirugía financiera, Costa se enfrenta al desafío de guiar a la UE a través de la crisis económica y política que azota al continente. Su nombramiento ha generado expectación en la comunidad internacional, ya que se espera que su liderazgo sea clave para abordar los retos que enfrenta la región. En este sentido, la elección de Costa se considera un golpe de timón para la UE, que busca recuperar la estabilidad y la confianza en un contexto de gran incertidumbre.
Antonio Costa, el 'cirujano político' portugués, asume la presidencia del Consejo Europeo
Antonio Costa será el nuevo presidente del Consejo Europeo, un hecho histórico que no tiene precedentes en la Unión Europea. El ex primer ministro portugués será el primer dirigente de color en ocupar este alto cargo en toda la historia de la UE.
Su elección genera expectación debido a su pasado político, marcado por un escándalo de corrupción que parecía salpicarle. Sin embargo, su capacidad para gestionar momentos de crisis con calma y su prestigio en Bruselas han sido clave para su nombramiento.
Un milagro político en tiempos de crisis
Costa es un político experimentado que ha demostrado su habilidad para liderar en momentos de crisis. En su etapa como primer ministro de Portugal, logró sacar al país de la crisis económica y convirtió a Portugal en una referencia de gestión en la UE, lo que se conoció como el milagro portugués.
Su capacidad para tomar decisiones importantes con la cabeza fría le ha valido el apodo de cirujano político. A pesar de las dudas que rodearon su elección, Costa cuenta con el apoyo de los líderes de la UE y de su partido, los socialdemócratas.
Un pasado político intenso
Antonio Costa tiene una carrera política muy dilatada. Fue ministro de Asuntos Parlamentarios, de Justicia y de Asuntos de Interior en los Gobiernos de Antonio Guterres y de José Sócrates. Luego, en 2007, se convirtió en alcalde de Lisboa y estuvo en el cargo hasta 2015.
En 2015, formó su primer Ejecutivo, conocido como la geringonça, un pacto con otras fuerzas de izquierda que llevó a Portugal a una tanda de soluciones que convirtieron al país en una referencia de gestión.
Su éxito político se tradujo en un nuevo pacto en 2019, pero las exigencias de los socios aumentaron y su fuerza parlamentaria también. Sin embargo, su segundo Gobierno de coalición no aguantó toda la legislatura y Costa optó por elecciones anticipadas.
Un regreso político sorprendente
Cuando su figura parecía agotada, Costa logró una mayoría absoluta en las elecciones de 2022, desafiando incluso a algunas encuestas que daban opciones reales a la derecha tradicional.
A pesar de las polémicas que rodearon su último Gobierno, Costa ha demostrado su capacidad para adaptarse a los cambios políticos y su habilidad para liderar en momentos de crisis.
Su regreso a la política es una sorpresa para muchos, pero su experiencia y capacidad política le han llevado a la presidencia del Consejo Europeo.
Los próximos cinco años no serán fáciles para Costa en Bruselas, pero su figura y capacidad política han demostrado ser clave para superar los desafíos que se avecinan.
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