Los médicos advierten sobre las graves consecuencias de aguantar las ganas de ir al baño

En el ámbito de la salud, los médicos han emitido una alerta importante sobre las consecuencias negativas que puede acarrear aguantar las ganas de ir al baño. Según expertos en urología y gastroenterología, retener la micción o la defecación puede desencadenar problemas serios en el organismo. Entre las graves consecuencias destacan la aparición de infecciones del tracto urinario, problemas intestinales y daños en la vejiga. Es crucial atender a las señales que el cuerpo envía y acudir al baño de manera oportuna para evitar complicaciones en la salud. Esta advertencia de los especialistas resalta la importancia de cuidar de la salud urológica y gastrointestinal para prevenir enfermedades y mantener un adecuado funcionamiento del sistema excretor.

Los médicos alertan sobre las graves consecuencias de aguantar las ganas de orinar

Orinar es una de nuestras necesidades fisiológicas básicas, pero retener la orina puede causar problemas de salud serios, advierten especialistas. Aunque pueda parecer inocuo, aguantar durante demasiado tiempo las ganas de hacer pis puede tener nefastas consecuencias para la salud.

Según un reportaje del Mirror, aguantar la micción es desaconsejable. Aunque algunos puedan pensar que sostenerla por un rato puede ayudar al suelo pélvico, nunca es buena idea prolongar la vejiga por mucho tiempo.

Los médicos recomiendan ir al baño al menos cada tres horas, ya que retener la orina puede causar una gran cantidad de problemas de salud, como infecciones, insuficiencia renal y, en el peor de los casos, la vejiga reventada.

Qué es la infección del tracto urinario, el problema de salud por el que han ingresado a la reina Sofía

No vaciar la vejiga lo suficiente puede provocar una infección del tracto urinario (ITU). Retener la orina como hábito puede significar que la vejiga puede comenzar a atrofiarse, lo que eventualmente podría provocar incontinencia.

Si retienes la micción durante 10 horas o más, puede provocar el desarrollo de retención urinaria. Esto significa que los músculos de la vejiga no pueden relajarse y te resultará difícil orinar, incluso cuando lo desees.

En casos extremos, contener demasiado la orina puede provocar que la vejiga explote. Es fundamental atender a las señales del cuerpo y no postergar la visita al baño para preservar la salud del sistema urinario.