El Ministerio de Defensa ha reiterado su compromiso de limitar el ruido generado por las actividades militares, una promesa que ha permanecido pendiente durante años. Esta declaración representa un avance significativo en la búsqueda de equilibrio entre las operaciones castrenses y el bienestar de las comunidades afectadas por el impacto sonoro. La sensibilidad hacia este problema ha ido en aumento, y la sociedad civil ha instado a tomar medidas concretas para mitigar los efectos negativos del ruido militar en el entorno. La transparencia y la responsabilidad por parte de las autoridades son cruciales para garantizar el cumplimiento de esta promesa y lograr una convivencia armónica entre la defensa nacional y el medio ambiente.
Defensa busca limitar ruido en actividades militares con nueva normativa en
El Ministerio de Defensa tiene previsto elevar al Consejo de Ministros una iniciativa para incluir las actividades militares en la Ley del Ruido, que actualmente las excluye de su ámbito de aplicación. Esta propuesta, que arrastra desde el año 2022, busca extender la legislación existente para prevenir los daños causados por la contaminación acústica en la salud humana, los bienes y el medio ambiente, a las actividades militares.
Según el Plan Anual Normativo de la Administración General del Estado para 2024, el departamento dirigido por Margarita Robles propone la aprobación de un real decreto que regulará el ruido en el contexto de las actividades militares. El objetivo es prevenir, vigilar y minimizar la contaminación acústica generada por estas actividades, con el fin de evitar y reducir los posibles daños derivados de la misma.
Este real decreto de Defensa deberá ser compatible con la misión de las Fuerzas Armadas y garantizar la salvaguarda de los intereses de la Defensa Nacional, así como la seguridad y eficacia de sus organizaciones e instalaciones.
El departamento de Defensa hace referencia a la aviación militar en torno a las bases aéreas como una fuente de contaminación acústica, dado que las operaciones aéreas pueden generar ruidos de diversa intensidad. En su página web, ya se destaca el esfuerzo por minimizar el impacto acústico de estas actividades mediante el uso de procedimientos de abatimiento sonoro en las maniobras de vuelo y la implementación de medidas para mitigar el ruido en la medida de lo posible.
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