EEUU aprueba en secreto la entrega de cazas, bombas y financiación bélica para Israel
La noticia de que Estados Unidos ha autorizado en secreto la entrega de cazas, bombas y financiación bélica a Israel ha generado controversia a nivel internacional. Esta decisión, tomada en un contexto de creciente tensión en la región, ha levantado alarmas en diversos sectores de la comunidad internacional. La aprobación de este tipo de material bélico resalta la estrecha relación entre ambos países y el papel de Estados Unidos como un aliado estratégico de Israel en el Medio Oriente. La entrega de armamento de alto calibre como cazas y bombas subraya la importancia de esta alianza en el contexto geopolítico actual, donde la estabilidad de la región se ve amenazada por diversos conflictos. La decisión de aprobar esta operación de forma discreta ha generado críticas y llamados a la transparencia por parte de varios actores políticos y organizaciones internacionales.
EEUU entrega armamento letal a Israel para atacar región de Gaza en secreto
En los últimos días, la Administración del presidente estadounidense Joe Biden ha autorizado en secreto un nuevo paquete de ayuda militar para Israel, a pesar de las reservas públicas de Washington ante la intención de las Fuerzas Armadas israelíes de atacar la región de Rafá, al sur de la Franja de Gaza.
El paquete de ayuda incluye más de 1.800 bombas MK84 de 900 kilogramos y 500 bombas MK82 de 225 kilogramos, según fuentes del Departamento de Defensa y del Departamento de Estado citadas por el diario The Washington Post. Este apoyo se ha realizado bajo cobertura de ayudas previamente aprobadas, evitando la solicitud de autorización al Congreso.
La entrega de armamento letal se suma a otro paquete aprobado la semana pasada por valor de 2.500 millones de dólares, que incluía la entrega de motores y 25 cazas F-35A, conforme a una propuesta aprobada por el Congreso en 2008, sin requerir una nueva autorización.
Controversia por ayuda militar de EEUU a Israel con bombas MK letales
Las bombas MK84 han sido directamente relacionadas con graves incidentes de víctimas civiles durante la ofensiva militar israelí en la Franja de Gaza. Estas bombas tienen la capacidad de destruir un edificio entero y causar cráteres de más de doce metros de diámetro y profundidad, lo cual representa un alto riesgo para la población civil en zonas densamente pobladas.
A pesar de que los ejércitos occidentales evitan el uso de este tipo de bombas en áreas con presencia de civiles, Israel las ha empleado de forma extensiva en la Franja de Gaza. Como consecuencia, más de 100 personas murieron el 31 de octubre en un bombardeo sobre el campo de refugiados de Yabalia, según la estimación de la ONU.
Un responsable del Departamento de Estado ha justificado esta acción basándose en el cumplimiento de una autorización de una notificación al Congreso que puede resultar en docenas de ventas militares al extranjero en las décadas que está vigente.
Desde el inicio de los ataques del Ejército de Israel sobre la Franja de Gaza el 7 de octubre de 2023, al menos 32.705 personas han muerto y 75.190 han resultado heridas. Esta ofensiva fue en respuesta a los ataques de Hamás del 7 de octubre, que provocaron la muerte de 1.200 personas.
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