Los huracanes más devastadores de la historia: desde las islas de Sea hasta Katrina

Los huracanes más devastadores de la historia: desde las islas de Sea hasta Katrina

A lo largo de la historia, los huracanes han sido uno de los fenómenos naturales más destructivos que han azotado la humanidad. Estos fuerzos de la naturaleza han provocado pérdidas incalculables en términos de vidas humanas y daños materiales. En este artículo, vamos a repasar algunos de los huracanes más devastadores de la historia, desde el que asoló las islas de Sea en 1900 hasta el huracán Katrina, que dejó a Nueva Orleans sumida en el caos en 2005. A través de esta retrospectiva, podremos comprender la magnitud de la destrucción causada por estos eventos climáticos y reflexionar sobre la importancia de estar preparados para enfrentarlos.

Los huracanes más devastadores de la historia

Fotografía tomada el lunes 1 de julio por el astronauta Matthew Dominick desde la Estación Espacial Internacional donde se muestra el huracán Beryl durante su paso por el Caribe.

El huracán Beryl, de categoría 5, ha causado destrozos en las islas de Barlovento y ahora amenaza también la isla de Jamaica, el sur de República Dominicana y Haití, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos. Los expertos advierten que la temporada de huracanes de este 2024 en el Atlántico será una de las más activas e intensas en décadas, con la formación de hasta 13 huracanes, y la preocupación de que el número de ciclones que toquen tierra pueda ser el doble de lo habitual.

Los más mortales de la historia

Pero, ¿cuáles han sido los más potentes de la historia? A continuación, presentamos algunos de los huracanes más devastadores y mortales de la historia:

1893: El huracán de Sea Islands

Su paso dejó entre 1000 y 2000 fallecidos, convirtiéndose así en uno de los huracanes más mortales de la historia de los Estados Unidos. Ocurrió en las Islas del Mar, que abarcan partes de Carolina del Sur y Georgia, en agosto de 1893. Tuvo una categoría 3 y causó una destrucción masiva entre las comunidades costeras, de mayoría afroamericana.

1926: El gran huracán de Miami

Cuando este huracán de categoría 4 tocó tierra el 18 de septiembre de 1926 en la ciudad de Miami, Florida, dejó a su paso una estela de caos y destrucción. Sus vientos llegaron a los 240km/h, causando la muerte de al menos 372 personas y miles de heridos.

1900: El huracán de Galveston

Es considerado uno de los desastres naturales más mortíferos en la historia de Estados Unidos. Su paso destrozó por completo la ciudad de Galveston y causó la muerte de entre 6.000 y 12.000 personas, aunque algunas estimaciones sugieren números aún más altos.

1935: El huracán de 'Labor Day'

Ocurrió el Día del Trabajo de 1935. Cuando este huracán de categoría 5 tocó tierra en los Cayos de Florida ese 2 de septiembre, los vientos alcanzaban los 295 km/h, y aunque era relativamente pequeño -con un ojo de 13 km de ancho- causó la muerte de al menos 423 personas, muchos de ellos, veteranos de la Primera Guerra Mundial que trabajaban en los proyectos de construcción en esas tierras.

1957: El huracán Audrey

Esta vez, el huracán de categoría 4 impactó en la región del Golfo de México. Era junio de 1957 y sus vientos sostenidos alcanzaron los 233 km/h. La presión central del huracán descendió a 946 mbar, lo que denota su gran fuerza. Murieron al menos 416 personas, aunque algunas estimaciones sugieren que el número de víctimas podría haber sido mayor.

2005: El huracán Katrina

Aunque tocó tierra como un huracán de categoría 3, Katrina tuvo un impacto catastrófico debido a la combinación de su fuerza, la geografía vulnerable de la región a la que afectó -el Golfo de México- y las fallas en la preparación y respuesta ante el desastre. El huracán causó la muerte de al menos 1.833 personas.

2017: El huracán María

Se trata del huracán más devastador de la historia contemporánea, que afectó a varias islas del Caribe en septiembre de 2017, siendo Puerto Rico la más afectada. De categoría 5, alcanzó vientos sostenidos de 280 km/h antes de tocar tierra. Cuando golpeó Puerto Rico el 20 de septiembre de 2017, lo hizo como un huracán de categoría 4, con vientos de 250 km/h y una presión central de 917 mbar. En total, murieron al menos 3.059 personas, aunque los estudios posteriores sugieren que el número real de muertes, incluidas las causadas por las secuelas y la falta de servicios esenciales, podría ser mucho mayor.