¿Son los huevos de los supermercados realmente frescos? La OCU aclara el misterio
La duda que ha rondado por la mente de muchos consumidores durante años ha sido finalmente resuelta por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). ¿Son realmente frescos los huevos que compramos en los supermercados? La respuesta no es tan sencilla como parece. A lo largo de los años, se han generado diversas teorías y suposiciones sobre la fecha de producción y la calidad de los huevos que se venden en los establecimientos comerciales. Sin embargo, la OCU ha decidido investigar y revelar la verdad detrás de esta cuestión, y los resultados pueden sorprender a más de uno.
¿Son frescos los huevos de los supermercados? La OCU desvela el misterio
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha llevado a cabo un estudio sobre los huevos que se venden en los supermercados de España, con el fin de determinar si estos productos son realmente frescos.
Los huevos son uno de los productos que no suelen faltar en ningún frigorífico, y con ellos se pueden hacer todo tipo de comidas: tortilla de patatas, tortilla francesa, huevo frito, pasado por agua. Las opciones son infinitas.
La información en el estuche
Cuando se compran huevos en el supermercado, en el estuche en el que se venden se puede encontrar una serie de datos que se deben tener en cuenta. Por ejemplo, el tipo de cría de gallina, el tamaño que tiene el huevo o la fecha de consumo preferente, entre otros.
La normativa actual exige que en cada uno de los huevos que se venden se tenga que indicar el código del sistema de cría y del productor. Esto quiere decir que los números, normalmente rojos, que se pueden leer en los huevos explican estos datos. La primera cifra corresponde con la forma de cría: producción ecológica (0), de gallinas camperas (1), de gallinas criadas en el suelo (2) y de gallinas criadas en jaula (3).
La frescura de los huevos
La OCU ha explicado que cada día que va pasando el huevo va perdiendo frescura, hasta que, por ley, su vida útil se acaba a los 28 días de la puesta. La entidad considera que lo mejor es consumir los huevos recién puestos o lo más cercanos a ese día.
El análisis de la OCU ha medido el espesor de la cámara, la gravedad específica, el pH de la clara y otros parámetros para determinar el grado de frescura. Todos los huevos que se han analizado tienen el mismo margen de vida útil y no todos los productos llegan con una frescura aceptable.
El error habitual en la nevera
La institución ha dicho que los de tipo campero suspenden los huevos que venden en Aldi, Olé, Ahorramás, Carrefour y Alcampo. ¿Y a qué se debe? La OCU dice que es muy probable que sea debido a que las condiciones de transporte y almacenamiento no hayan sido las idóneas.
El peso de los huevos
La OCU explica que todos los productos que se han analizado cumplen con lo están anunciado, pero que existen casos en los que están al límite inferior del peso de su categoría. Esto se debe a que desde que se pesan, clasifican y etiquetan en el centro de embalaje, los huevos van mermando por el intercambio de gases y agua que se produce a través de la cáscara porosa.
Dependiendo de la temperatura y la humedad de conservación, la merma puede ser grande y llegan a perder la categoría comercial con la que se había envasado. Por este motivo, la OCU dice que se debería poder garantizar que el peso por el que paga el consumidor se mantiene dentro de los 28 días de vida útil.
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