El reciente terremoto de magnitud 7,7 que sacudió Taiwán ha dejado a su paso al menos 4 muertos y ha generado activas alertas de tsunami en países como Japón y Filipinas. Este devastador fenómeno natural ha sembrado el caos y la tragedia en la región, poniendo en alerta máxima a las autoridades y a la población afectada. Las consecuencias de este desastre son todavía inciertas, mientras los equipos de rescate trabajan arduamente en la búsqueda de posibles sobrevivientes entre los escombros. La solidaridad y la pronta acción se vuelven fundamentales en momentos como estos, donde la naturaleza nos recuerda su inmensurable poder y la fragilidad de nuestras vidas.
Terremoto de magnitud 7,7 en Taiwán deja al menos 4 muertos
Un edificio colapsó parcialmente en el condado de Hualien, el más cercano al epicentro. Al menos cuatro personas han fallecido y 57 han resultado heridas tras una serie de potentes terremotos, el más fuerte de ellos de magnitud 7,7 en la escala de Richter, según la agencia de meteorología japonesa, que han sacudido este miércoles por la mañana la isla de Taiwán, provocando el colapso de algunos edificios y dañando otro tipo de infraestructuras. El epicentro del sismo se situó en el mar, a 25 kilómetros al sureste del condado de Hualien (este), con una profundidad de 15,5 kilómetros.
El terremoto provocó la emisión de una alerta por tsunami, también en las islas de Japón y Filipinas, pero pasadas dos horas y media del movimiento telúrico, el Centro de Alertas de Tsunamis del Pacífico ha rebajado la amenaza de tsunami. Las imágenes más impactantes del terremoto de Taiwán revelan la magnitud de la tragedia.
Los heridos han sido reportados en diferentes zonas de Taiwán, con un total de 44 personas dañadas en el condado de Hualien, siete en Nuevo Taipéi (norte), y otros en ciudades como Keelung (centro), Taipéi, Taoyuan (norte) y Taichung (norte). Los equipos de emergencias de la isla ya se encuentran realizando tareas de rescate para salvar a las personas atrapadas entre los escombros de edificios colapsados.
El temblor causó el colapso de varios tramos de la autopista Suhua, el desprendimiento de rocas en dos túneles y la interrupción de carreteras dentro del parque de Taroko, dejando a varias personas y vehículos atrapados. En total, el número de incidentes relacionados con el desastre ha ascendido a 933, con 624 casos clasificados como otros tipos de sucesos, seguidos por 150 incidentes de infraestructura civil y 97 de daños a edificios.
Este terremoto de 7,7 grados es el más fuerte que ha experimentado Taiwán en 25 años. La Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC), mayor productora de semiconductores del mundo, ha evacuado a parte de sus empleados de las instalaciones siguiendo los protocolos de seguridad. Las clases fueron suspendidas en el condado de Hualien, y se han reportado daños en edificaciones emblemáticas de Taiwán, como el Monumento Conmemorativo Nacional del expresidente Chiang Kai-shek.
Las autoridades locales han elevado el nivel de respuesta a desastres, desplegando equipos de emergencia y realizando labores de rescate y reconstrucción. Aunque inicialmente se emitió una alerta de tsunami que afectaba a Japón y Filipinas, esta fue levantada tras evaluar la situación.
El temblor también se sintió en las islas japonesas de Okinawa y en diferentes ciudades de Taiwán, donde se suspendieron temporalmente las operaciones del metro. En Filipinas, el Instituto de Vulcanología y Sismología (PHIVOLCS) también había alertado sobre un posible tsunami, que finalmente fue descartado.
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