En el marco de la compleja situación geopolítica en Oriente Medio, el debate sobre las fronteras de Israel sigue siendo un tema de gran interés y controversia. Desde el conflicto de 1967, que marcó un punto de inflexión en la historia del conflicto árabe-israelí, hasta la situación actual, caracterizada por la ocupación israelí y la lucha por la autodeterminación palestina, el tema de las fronteras de Israel sigue siendo un asunto sumamente polémico. En este contexto, la reciente declaración del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, sobre los límites de Israel ha generado un intenso debate en la escena política internacional. ¿Qué límites está hablando Pedro Sánchez? En este artículo, exploraremos la historia y la situación actual de las fronteras de Israel, y analizaremos el contexto político en el que se enmarca la declaración del presidente español.
- Fronteras de conflicto: El reconocimiento de Palestina por parte de España y el límite del Estado Palestino
- Las fronteras de 1967
- La Guerra de los Seis Días y el cambio en la situación
- La Resolución 242 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas
- La situación actual
- Los asentamientos y la situación en Cisjordania
- La situación en Jerusalén
- La declaración de Sánchez sobre Palestina
- El futuro de la solución de dos Estados
Fronteras de conflicto: El reconocimiento de Palestina por parte de España y el límite del Estado Palestino
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que España reconoce oficialmente el Estado de Palestina, delimitado por las fronteras de 1967 y con Jerusalén Este como capital. Sin embargo, esas fronteras siguen siendo muy difusas y, aunque de iure cuentan con el reconocimiento de la ONU, la realidad es que Israel controla de facto la totalidad del territorio histórico de Palestina e, incluso, se ha anexionado algunas partes que teóricamente le corresponderían al Estado Palestino.
Las fronteras de 1967
Las fronteras de 1967 hacen referencia a las que existían antes de la Guerra de los Seis Días y se basan, en líneas generales, en las que marcó el armisticio de 1949 tras la guerra árabe-israelí, conocida en Israel como guerra de la independencia. Esas fronteras dibujan un Estado Palestino formado por Cisjordania y Gaza, con capital en Jerusalén Este.
La Guerra de los Seis Días y el cambio en la situación
En la Guerra de los Seis Días, Israel derrotó militarmente a una coalición de países árabes de la región y se anexionó los Altos del Golán sirios y la península egipcia del Sinaí, además de todo el territorio palestino que había quedado fuera de su control en el armisticio del 49: la Franja de Gaza, entonces dominada por Egipto; y Cisjordania y Jerusalén Este, que estaban administradas por Jordania.
La Resolución 242 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas
La Resolución 242 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas consideró inadmisibles esas anexiones territoriales e instó a Israel a retirar a sus fuerzas armadas de todos los territorios ocupados en el marco de la Guerra de los Seis Días, un dictamen que sentaría las bases de los futuros Acuerdos de Camp David (1978) y los tratados de paz con Egipto (1979) y Jordania (1994).
La situación actual
Israel solo devolvió el Sinaí a Egipto (un proceso que se completó en 1982) y, a pesar de las presiones recurrentes de la ONU, ha mantenido y sigue manteniendo bajo su control el resto de los territorios ocupados en la Guerra de los Seis Días: Altos del Golán, Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este.
Los asentamientos y la situación en Cisjordania
Israel no solo ha impuesto una autoridad militar en los territorios ocupados de Gaza y Cisjordania, también ha llevado a cabo una política de asentamientos que, poco a poco, ha ido reduciendo el territorio efectivo disponible de la población palestina.
La situación en Jerusalén
La parte oriental de la ciudad santa ha sido incorporada formalmente al Estado hebreo mediante la llamada Ley de Jerusalén, que en 1980 la proclamó entera y unificada como capital de Israel.
La declaración de Sánchez sobre Palestina
La ONG Peace Now, que monitoriza la política de asentamientos de Israel, estima que cerca de medio millón de colonos judíos viven actualmente en Cisjordania (478.600), prácticamente la mitad de ellos en Jerusalén Este, en los 147 asentamientos levantados por el gobierno hebreo y los 191 que se han construido sin su aprobación formal.
El futuro de la solución de dos Estados
La solución de los dos Estados que defiende Naciones Unidas y a la que España ha dado este martes un espaldarazo con el reconocimiento del Estado Palestino pasa por volver al statu quo anterior a la guerra de los Seis Días, pero hay obstáculos que parecen insalvables.
Israel no contempla una partición de la ciudad ni entregar el control de Jerusalén Este a la Autoridad Palestina, a pesar de que es la solución que mayor consenso internacional aglutina. Asimismo, la ONU contempla un acuerdo entre las partes para la administración de la ciudad vieja, donde se encuentran el Muro de las Lamentaciones (lugar sagrado del judaísmo) y la Explanada de las Mezquitas (lugar sagrado del islam), una propuesta que también cuenta con el rechazo frontal del gobierno israelí.
El reconocimiento de Palestina por parte de España es un paso importante hacia la solución de dos Estados, pero es necesario que se acompañe de un proceso de negociación serio y de buena fe entre las partes para alcanzar una solución justa y duradera.
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