En un fallo esperado pero no menos significativo, el Tribunal Supremo ha rechazado la petición de amnistía presentada por el expresidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, en relación con los cargos de malversación en el marco del llamado 'procés separatista'. Esta decisión judicial mantiene en vigor la orden de detención emitida contra el líder independentista, quien se encuentra actualmente en Bélgica. El Tribunal Supremo ha considerado que la petición de amnistía no cumple con los requisitos establecidos por la ley, lo que significa que Puigdemont seguirá siendo objeto de persecución penal por sus acciones durante el intento de secesión de Cataluña en 2017. Esta resolución judicial es un nuevo golpe para los independentistas catalanes y abre nuevas incógnitas sobre el futuro de Puigdemont.
No amnistiado: Puigdemont seguirá bajo investigación por malversación
El Tribunal Supremo ha emitido una sentencia contundente en relación con el caso de malversación del procés, en el que está involucrado el expresident de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont. En su decisión, el alto tribunal ha declarado que el delito de malversación no será amnistiado, lo que significa que Puigdemont seguirá bajo investigación y enfrentará las consecuencias legales correspondientes.
Además de la no amnistía, el Tribunal Supremo también ha decidido mantener las órdenes de detención contra Puigdemont, así como contra Toni Comín y Lluís Puig, otros dos exconsejeros que también están involucrados en el caso. Esta decisión supone un revés importante para los implicados, quienes esperaban que el Gobierno les concediera una amnistía.
La investigación por malversación se centra en la presunta utilización de fondos públicos para financiar la celebración del referéndum independentista de Cataluña en 2017. El Tribunal Supremo ha considerado que este delito no puede ser amnistiado, ya que se considera un delito grave que afecta a la integridad del Estado y a la confianza en las instituciones.
La sentencia del Tribunal Supremo es un golpe duro para los partidarios de la independencia de Cataluña, quienes esperaban que el Gobierno les concediera una amnistía. Sin embargo, la decisión del tribunal Supremo es un claro mensaje de que la justicia española no está dispuesta a dejar impunes los delitos cometidos durante el procés.
El caso de malversación del procés es solo uno de los muchos procedimientos judiciales que se han abierto contra los líderes independentistas catalanes. La investigación sigue en curso, y es probable que se produzcan nuevos desenvolvimientos en las próximas semanas.
Mientras tanto, Puigdemont y los otros implicados deberán enfrentar las consecuencias legales de sus acciones. La decisión del Tribunal Supremo es un recordatorio de que la justicia española es independiente y que no hay delitos que queden impunes.
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