¿Tienes un ordenador con Windows 10? Este sistema operativo no ofrecerá más actualizaciones a partir de esta fecha. La noticia de que Windows 10 dejará de recibir actualizaciones a partir de ahora ha impactado a millones de usuarios en todo el mundo. Esta decisión de Microsoft supone un cambio significativo en el soporte técnico del sistema operativo más utilizado a nivel global. A partir de esta fecha, los usuarios de Windows 10 deberán considerar cuidadosamente sus opciones, ya que la falta de actualizaciones podría dejar sus dispositivos vulnerables a posibles amenazas cibernéticas. Es importante estar al tanto de las implicaciones que esto conlleva y tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los datos y la privacidad en los dispositivos que utilizan este sistema operativo.
Windows dejará de recibir actualizaciones en 2025: ¿Estás preparado?
Hace casi tres años que Microsoft lanzó la actualización de su sistema operativo con Windows 11 y dentro de uno, en el 2025, su software 10 dejará de estar disponible en su tienda. Concretamente, dejará de ofrecer soporte técnico, es decir, las actualizaciones de seguridad gratuitas dejarán de llegar a los ordenadores con dicha versión. Esto supone un problema para los ordenadores y usuarios que no han decidido dar el paso a Windows 11, ya que en el calendario hay marcadas a fuego dos fechas muy importantes que fijan el límite para cambiar de sistema operativo.
Fechas límite para cambiar a Windows 11: La primera de ellas es el día 11 de junio de 2024 debido a que terminará el soporte de las actualizaciones de licencias de Hogar, Profesional, Educación o Empresa para Windows 10 21H2. Lo que deberás hacer, si tienes la posibilidad, es subir a 22H2. Si, por el contrario, ya estás en la última versión del sistema operativo, tendrás más margen. Esta franja aumenta hasta el 14 de octubre del 2025, y será el último día en el que se dejarán de recibir actualizaciones de seguridad.
Ante esta situación, Windows 11 todavía no es el preferido por los usuarios y una de las razones es que aún no genera la confianza suficiente debido a la inseguridad de que se produzca algún fallo en su funcionamiento. Las personas que no quieran cambiar, por los motivos que sean, no van a sufrir ningún bloqueo del ordenador ni bajones de rendimiento, pero sí que su seguridad se va a ver mermada por la falta de actualizaciones en ese sentido. Por lo que siempre que haya opción, es más que recomendable dar el relevo al siguiente sistema operativo de Windows.
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