En el marco de la campaña catalana, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha decidido reactivar su discurso del 23J, en el que se centró en criticar a la oposición, especialmente al PP y a Vox, por su forma de hacer política. Esta estrategia busca enfrentar lo que Sánchez considera como la máquina del fango, un término que utiliza para describir las prácticas políticas que se centran en la descalificación y la difamación del adversario. Con este enfoque, el presidente del Gobierno busca movilizar a la sociedad civil y a los votantes progresistas contra lo que considera una forma de hacer política que puede ser perjudicial para la democracia española.
Sánchez reactiva el discurso contra el PP y Vox en la campaña catalana
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se vuelca en el ecuador de la campaña del Partido Socialista Catalán (PSC) para las elecciones de Cataluña del 12 de mayo. Tras cancelar su agenda durante cinco días, Sánchez reaparece en la Feria de Abril en Cataluña y posteriormente en un acto oficial en Sant Boi de Llobregat, donde lanza un mensaje contundente contra el Partido Popular (PP) y Vox.
Sánchez denuncia la máquina del fango de Alberto Núñez Feijóo (PP) y Santiago Abascal (Vox), asegurando que el voto del candidato del PSC, Salvador Illa, servirá como un apoyo contra este fango. El presidente del Gobierno insiste en que está dispuesto a hacer frente a los ataques y bulos de la derecha.
La ofensiva contra el PP y Vox
La ofensiva del PSOE contra el PP y Vox viene acompañada por un informe de la ONU que critica con dureza las leyes de concordia de la coalición de derechas en Aragón, Castilla y León y Comunidad Valenciana. El Gobierno considera contundente este informe y convoca a Aragón a la comisión bilateral.
Fuentes socialistas señalan que el PP y la ultraderecha arrastran la imagen internacional de España por el fango, y exigen a Feijóo que se posicionese con las víctimas o con las leyes de la vergüenza. Los socialistas aprovechan para llamar a la movilización para convertir España en dique de contención contra los ultras.
La estrategia del 23J
Sánchez reactiva la estrategia del 23J en la campaña catalana, acudiendo a un acto con Illa en la Fiesta de la Rosa del PSC en Montmeló. El presidente del Gobierno lidera un plan de regeneración democrática y de limpieza, con el fin de acabar con los bulos, la desinformación, el fango y los movimientos reaccionarios.
En la campaña de las elecciones generales, Sánchez apodó al PP y Vox como la derecha extrema y la extrema derecha, y les acusó de querer una España gris y oscura. Ahora, los socialistas alertan sobre las consecuencias de los pactos entre el PP y Vox, como son las llamadas leyes de concordia.
El PSOE decidió internacionalizar su ofensiva contra las leyes de concordia del PP y Vox, elevándolas ante la ONU, el Parlamento Europeo y el Consejo de Europa. Los socialistas eran conscientes de que necesitaban movilizar a su electorado, después de que el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) del mes de marzo constatase que la amnistía y el caso Koldo habían hecho mella.
El último barómetro sobre intención de voto realizado en abril muestra un giro favorable para el PSOE, que escaba diez puntos, situándose por delante del PP, que caería en cuatro.
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