La espera ha terminado. Después de años de desarrollo y pruebas, Starliner, la nave espacial de Boeing, está lista para embarcarse en su primer vuelo tripulado a la Estación Espacial Internacional (ISS). Este hito histórico marca un nuevo capítulo en la exploración espacial tripulada de los Estados Unidos. La nave espacial, diseñada y construida por Boeing en colaboración con la NASA, tiene como objetivo transportar a los astronautas de manera segura y eficiente desde la Tierra hasta la órbita terrestre. El lanzamiento, programado para los próximos días, marcará el inicio de una nueva era en la exploración espacial comercial.
Starliner, listo para su primer vuelo tripulado a la ISS
La nave Starliner de Boeing, el segundo mayor fabricante de aeronaves comerciales, ha recibido 'luz verde' para su primera misión espacial tripulada. La nave despegará el martes 7 de mayo a bordo de un cohete Atlas V de la compañía United Launch Alliance (ULA), desde una plataforma de la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral (Estados Unidos).
Según la Agencia EFE, en una teleconferencia celebrada el pasado viernes 3 de mayo, el gerente del Programa de Tripulación Comercial de la NASA, Steve Stich, señaló que las revisiones finales preparatorias para el lanzamiento fueron positivas y que Starliner consiguió la autorización final para viajar hacia la Estación Espacial Internacional (ISS).
La misión tripulada
La nave Starliner llevará a los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams a la Estación Espacial Internacional para acoplarse al puerto delantero del módulo Harmony. Antes del despegue, los compañeros de la tripulación SpaceX Crew-8 de la NASA abordarán la nave Dragon para trasladarse al puerto cenital de Harmony, así que Starliner se podrá acoplar sin complicaciones.
La nave aterrizará con un sistema de paracaídas después de una semana en la estación, y los astronautas regresarán al suroeste de Estados Unidos.
El éxito de la misión supondrá para la NASA contar con un segundo proveedor, después de SpaceX, para el transporte de misiones tripuladas y de carga al laboratorio orbital, en virtud de contratos suscritos con ambas firmas en 2014.
La nave Starliner será capaz de transportar cuatro astronautas, o una combinación de tripulación y carga, para misiones en la órbita terrestre baja. Una vez completada la misión, la NASA empezará el proceso final de certificación de Starliner para futuras misiones tripuladas a la ISS.
La nave Starliner es un paso importante en la colaboración entre la NASA y la industria privada para llevar a cabo misiones espaciales tripuladas de manera segura y eficiente.
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